Bacalar, 17 de marzo
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Docentes, incluso algunos con cargo de supervisores, quienes están adscritos al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), continúan cobrando un salario en el sistema educativo pese a que jamás acuden a sus respectivos planteles escolares, al “dobletear” como funcionarios o miembros del Cabildo de la administración pública municipal de Bacalar.
La inconformidad surge de trabajadores de base del Ayuntamiento, quienes considerar este cobro doble un abuso y una burla a su propio salario asignado en la nómina, de menos de seis mil pesos al mes.
Aunque esta irregularidad la han dado a conocer en varias ocasiones, estos servidores públicos continúan burlándose las disposiciones establecidas en la Reforma Educativa.
De hecho, esta legislación contempla castigos para faltistas. El personal docente que, sin justificación, falte al trabajo más de tres días en un periodo de un mes será dado de baja. La Secretaría de Educación estaría obligada a dar estas plazas a otros docentes que sí trabajen, en lugar de dar onerosos salarios a estos “aviadores”.
El trabajo en el Ayuntamiento de Bacalar inicia habitualmente a las nueve de la mañana hasta pasadas las cuatro de la tarde, por tanto, no les queda tiempo a estos funcionarios para cumplir con sus obligaciones académicas.
Una consecuencia más de la Reforma Educativa, es la centralización de la nómina a manos de la Federación, que por transparencia hizo pública las plazas otorgadas a estos funcionarios y los ingresos recibidos. Con ello, existen pruebas irrefutables de la ilegal acción de estos funcionarios, que debieron haber pedido licencia o renunciado a su puesto como docente.
CÓMPLICES DEL DESFALCO
Dentro de estos servidores públicos se encuentran el Síndico Municipal, Luis Ernesto Silveira Gómez, quien aparece en la nómina de la SEP como maestro en la escuela “Margarita Maza de Juárez”, donde cobra casi 30 mil pesos mensuales. Se sabe que el síndico recibe otros 40 mil pesos al mes por su puesto en el Ayuntamiento.
Junto a él, también se incluyen tres miembros del Cabildo de Bacalar: el segundo regidor, Juan Francisco Góngora Martín, quien figura como supervisor de la Primaria General 13; la tercera regidora, Aurora Cámara Chi, quien figura como nuevo ingreso producto de un concurso de plaza; y el noveno regidor, Arturo Calderón Gómez, que sorprendentemente goza de tres plazas en dos escuelas distintas, las que sumado a su sueldo como concejal, le traen ingresos cercanos a los 70 mil pesos cada mes.
A ellos, se suma el coordinador de Servicios Públicos Generales, Rubén Luna Garrido, quien con su trabajo “oficial” más su plaza de “aviador”, devenga la nada despreciable suma de 35 mil pesos mensuales.
Otras figuras municipales que se sabe reciben dinero a través de argucias del SNTE son el contralor Juan Gabriel Borges Chim, el oficial mayor Edie Borges Rosado y el director de Registro Civil, Juan Hernández Lima, sobre quienes la SEP no dispone de información oficial, por lo que no se descarta que cobren por honorarios.
DESANGRAN PRESUPUESTO
Cabe mencionar que en base a la información revelada por la SEP, el Centro de Análisis de Políticas Públicas “México Evalua” detectó que en Quintana Roo se cobran de forma irregular entre 126 y 404 millones de pesos por “aviadores” incrustados en la nómina educativa.
Esto significa una merma de hasta el 8.28% del presupuesto destinado al pago de salarios de maestros.
Se estima que hay 156 maestros “aviadores”, pese a las reiteradas declaraciones de la Secretaría de Educación y Cultura (SEyC) estatal, de que todos los maestros comisionados ya pidieron licencia.
Al dinero cobrado por estas personas que no dan clases, se suma gente fallecida o jubilada con clave de nómina aún activa, los 917 profesores trabajando en plazas distintas a las asignadas y los 842 docentes que no fueron hallados en sus centros de trabajo durante el censo realizado el año pasado por el Inegi.