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En la entidad se dará paso a la transición para encontrarse con la plena democracia. El proceso de transición está llegando a su fin en todo el Estado, así hoy quedará abierto otro capítulo en la historia del con la toma de posesión en el ítem de la ley –a juro–, de Carlos Joaquín González como Gobernador de Quintana Roo, ante los diputados del Congreso del Estado, el pueblo quintanarroense, con la presencia de un representante presidencial, invitados especiales y con los aliados que lo acompañaron al triunfo para la unción gubernamental en este día.
Con el fin de proclamar el inicio de un nuevo mandato, con las disposiciones constitucionales, en sesión solemne en el Parlamento local, el gobernador electo Carlos Joaquín González toma la protesta de ley hoy como jefe del Ejecutivo estatal.
Quintana Roo está viviendo su propio proceso de transición hacia un estado de derecho político y social. También se busca transitar en el estado permanentemente hacia una nueva convivencia en la vida política con la incorporación del nuevo mandatario estatal.
En todo el Estado está presente el tema transicional y su perspectiva política con el derecho constitucional basado en la preferencia del pueblo con el sufragio efectivo.
Los actores políticos locales, después del triunfo electoral del pasado mes de junio en las elecciones parlamentarias, el Poder Ejecutivo y en los municipios, están conscientes de una victoria electoral para el cambio de gobierno, siempre dentro de la Constitución y las leyes.
Todos se han orientado hacia un nuevo constitucionalismo con los imperativos de las libertades del pueblo, -Vox Populi, Vox Dei-, quedando atrás el modelo pasado.
Es interesante rescatar casos puntuales que ayuden a entender la dinámica de las transiciones políticas. En Quintana Roo se puede tomar el caso como histórico, que pese a haberse desistido como de un grupo tradicional, no fue hasta el triunfo de Carlos Joaquín González, en las urnas electorales que la transición política se fuera consolidando hasta el día de hoy.
La institucionalización del nuevo modelo político de Quintana Roo con el sistema electoral para el triunfo. La alternativa de la oposición fue la concentración de dos partidos aliados y de la voluntad de las fuerzas sociales. Acuerdo que fue la base hacia la victoria del nuevo gobernante quintanarroense en las elecciones pasadas.
El caso del gobernador electo –con otro signo y color– es un ejemplo único de alternancia política en la entidad quintanarroense, hoy se está llevando un proceso de cambio democrático y de transición constitucional que es modelo en esta región caribeña.
Y que este mecanismo de nueva integración imponga lo que se estará haciendo en base al tratado de asunción del nuevo Gobernador, seleccionando un gabinete gubernamental acorde con los protocolos políticos que lo acompañarán en la encomienda, aunando las normativas aceptadas por todos los que van a servir al Estado.
Con el nuevo Gobernador para presidir el organismo intergubernamental de Quintana Roo por un período de seis años, hasta ahora, el único caso que llega con otros signos y colores a la gubernatura para dirigir los destinos de Quintana Roo.
También llegó la alternancia en el Parlamento local
La alternancia también llegó para regir los destinos del organismo que aglomera a los diputados del Parlamento local, para luchar y combatir sin ofender, a buscar puntos de convergencia en medio de las discrepancias y a aceptar que es difícil para un solo signo y color la posesión total de la verdad, de la razón y la justicia.
En el proscenio legislativo fue electo el diputado de la bancada del grupo azul que presidirá la Gran Comisión en el Congreso del Estado, que irá en busca de un parlamento que sea integral a través de los debates sobre la concepción de la política, haciendo a un lado los conflictos antagónicos.
Los honorables representantes populares se verán luchado en la arena legislativa y se sabe que muchas veces en esa lucha, en momentos de acaloramiento, se sostienen cuestiones legislativas de las que después, con reflexión, se pueden aceptar modificaciones con objetividad, con un análisis concreto desapasionado y con mesura.
Elaborando proyectos de iniciativas que se adaptarán a las condiciones para las cuales han sido diseñadas, enmarcadas en los límites y potencialidades de la acción legislativa. Dedicándose a la creación de mecanismos sólidos, salidas viables y factibles de las diversas leyes a legislar por el bien de Quintana Roo y se gente.