Chetumal, 5 de agosto
Debido a la falta de fuentes de empleo en el extremo sur de esta frontera, diariamente cruzan el río Azul, afluente del río Hondo, entre 25 y 30 habitantes de la comunidad de La Unión para trabajar en las granjas menonitas que se encuentran en Belice, así como en obras de construcción pública y privada, en donde el salario mínimo es de 35 dólares beliceños, aunque solamente ocupan a los hombres sanos y fuertes, en su mayoría jóvenes.
La Unión es la comunidad más sureña en la frontera con Belice marcada por el río Hondo, que a espaldas de esa localidad nace de la confluencia del río Bravo o Chanchich, procedente de Belice, y del río Azul, procedente de Guatemala. La frontera México – Belice en La Unión está marcada principalmente por el río Azul, llamado por los beliceños Blue Creek, mismo nombre que toma la vecina región menonita a donde muchos habitantes de la localidad mexicana acuden en busca de trabajo.
José Oropeza Calzada, extrabajador que cruzó el río fronterizo para emplearse en territorio beliceño, afirmó que en los empleos calificados –mecánicos, operadores de maquinaria pesada, constructores-, logran ganar al día hasta 100 dólares beliceños, que son aproximadamente 700 pesos.
Destacó que en la frontera norte del país los mexicanos cruzan el río Bravo como “mojados” en busca del sueño americano; sin embargo, en la zona sur cruzan el río Azul en las pequeñas embarcaciones que se encuentran en la comunidad, por lo tanto, sólo se les puede llamar trabajadores.
Explicó que los mexicanos en Belice se emplean en la cría y matanza de pollos, otros en el cuidado de ganado bovino y algunos en labores domésticas, se van a las seis de la mañana y regresan a la cinco de la tarde.
Oropeza Calzada afirmó que diariamente se sacrifican hasta 40 mil pollos, los cuales se comercializan en Belice; no traen nada a La Unión, porque los menonitas son muy cuidadosos, por lo que antes de retirar al personal lo revisan detalladamente.
Por otra parte, señaló que fue trabajador de confianza de una familia de menonitas, pues cuando viajaban a Canadá, por lapso de tres meses le encargaban la casa y los animales, pero ahora como se encuentran en avanzada edad ya no requieren de sus servicios.
Aseguró que en La Unión, Othón P. Blanco, se carecen de fuentes de empleo, no hay empleo temporal, “no hay nada”, por lo que exhortó a las autoridades a que volteen la vista a ese rincón de México.
Bien pagados, obreros de la construcción
Por su parte, el albañil Alvino Ramírez afirmó que la mano de obra en el sector de la construcción es uno de los empleos más cotizados en el lado beliceño, y aseguró que desde hace 40 años ha logrado subsistir gracias a esta labor, pues constantemente surgen en el país vecino muchas fuentes de empleo en proyectos de obra pública y privada.
El hombre dijo a POR ESTO! de Quintana Roo que el sueldo común en la industria de la construcción beliceña suele ser de 40 a 50 dólares beliceños por día, que equivalen a unos 260 a 350 pesos mexicanos.
Pero además de tener un salario estable, Alvino Ramírez dijo que los contratistas beliceños del sector de la construcción también les ofrecen seguro social y otro tipo de prestaciones, lo que hace a este tipo de trabajo uno de los de mayor demanda entre los habitantes de La Unión.
En grupos de 3 a 10 personas, diariamente cruzan en barcazas el delgado río Azul decenas de pobladores de La Unión para trabajar en Belice, y retornan a Quintana Roo a partir de las 4 de la tarde en adelante.
Para pasar a territorio beliceño, tienen que pagar 10 pesos mexicanos o un dólar beliceño, para ser transportados en pequeñas barcazas de madera a través del río Azul, es un viaje muy corto ya que es un pequeño riachuelo de no más de 10 metros de ancho lo que divide a la comunidad de La Unión con el país de Belice.
Alvino Ramírez expresó que, desde muy jóvenes, los habitantes de La Unión cruzan a Belice en busca de algún tipo de trabajo, pues asegura que ahí hay más oportunidades laborales y mejores pagadas que en México, además que los empresarios beliceños les dan un buen trato, pues reconocen el buen trabajo que hacen los mexicanos.
Por su parte, Pedro Luna Velázquez, destacó que las pocas fuentes de empleo que se generan en el país beliceño son peleadas por los jóvenes, por ser la única forma de tener ingresos, pues en La Unión apenas se puede sobrevivir.
Asimismo, dijo que en la comunidad de La Unión están reparando 700 metros de calle, pero es una obra que no generó empleos para los habitantes de la comunidad, porque la empresa trajo a su personal.
Finalmente, el ciudadano Claudio Vargas Ramírez afirmó que ante la falta de fuentes de trabajo en La Unión, la mayoría de las personas se dedica al cultivo de maíz de autoconsumo y cría de animales para poder subsistir.
Luis Enrique Tuz (Por Esto QRoo)
