Principales

La intervención quirúrgica imposible en la clínica del ISSSTE en Chetumal

Chetumal, 8 de agosto
Emilio Santana

Desde hace seis meses X superaba los trámites engorrosos en la Clínica Hospital del ISSSTE en Chetumal para poder ser operado. Tras hacerse los estudios clínicos de rigor para tan importante operación, se le dio una fecha para que ingresará al nosocomio. Pero no contaba que el quirófano en donde los intervendrían estaba siendo mejorado en infraestructura hospitalaria, por lo que se reprogramó la intervención quirúrgica.

X tuvo que esperar que arreglaran el sitio y de nueva cuenta esta semana que terminó se le programó para la intervención. Nuestro personaje llegó el jueves y estuvo sin probar alimento como se lo pidieron, y le aplicaron vía intravenosa sueros y otros líquidos para tenerlo en óptimas condiciones físicas.

“Y nos dieron la una, las dos y la tres”, como dice la canción de Joaquín Sabina, y a nuestro personaje ese jueves, nadie le dio el mínimo dato de su operación. Consideró el detalle como mero trámite y pacientemente esperó que al otro día –o sea el viernes– le realizaran la operación, pero esto no sucedió. Vio pasar el personal médico, enfermeras, doctores, personal de limpieza y hasta el vigilante, y nadie le decía cuando procederían a intervenirlo.

Ya harto de esperar y sin probar alimento solido alguno por más de 48 horas, preguntó el por qué su situación y solo recibió esta respuesta: “que los fines de semana no laboraban los médicos y especialistas que hacen este tipo de cirugía que requería, y que solo un médico general lo atendería”.

¿Y para que rayos –se preguntaba X– necesitaba su caso un médico general?, si por ese trámite ya había pasado inicialmente desde antes que le dieran fecha para su cirugía.

Viendo la actitud molesta de nuestro paciente, al personal médico de guardia de los fines de semana, solo le quedó decirle la verdad: que sería muy difícil y casi un milagro que lo operarán, pues sábados y domingos no laboran especialistas.

Triste y cabizbajo, a X no le quedó de otra que pedir su alta e irse a su casa a esperar mejor oportunidad, pero antes de eso el personal médico le extendió un documento para el trámite. Eso sí lo hicieron de” volada”, como dice la chaviza.

Este caso de X es la realidad que padecen otros pacientes en la clínica hospital del ISSSTE en Chetumal, porque les dan fecha para atenderlos y luego lo hacen esperar días y hasta semanas para operarlos. Pero eso sí, el cobro de las cuotas de aportación de los trabajadores son descontadas automáticamente cada quincena por parte de este sistema médico llamado ISSSTE.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba