Principales

Manoseo electoral en el PAN

Golpe de Mazo

Novedades Chetumal
.

Las elecciones internas por la dirigencia nacional del PAN no fueron nada democŕaticas, al menos no en Quintana Roo, donde el ejercicio estuvo embarrado desde el principio por la manipulación que ejerció el todavía dirigente, Eduardo Martínez Arcila, sobre la militancia para que su “gallo”, el diputado federal Ricardo Anaya, resultara victorioso.

Y es que Martínez Arcila, al que los propios panistas señalan como el principal responsable de la debacle del PAN en el estado, se jugó el todo por el todo en el proceso interno, pues pretende permanecer al frente del blanquiazul con el apoyo del nuevo dirigente nacional que, dicho sea de paso, fue el delfín del anterior presidente, Gustavo Madero.

ricardo anayaPero si bien la apuesta fue favorable para sus ambiciones políticas y personales, se sacrificó la imagen del partido conservador ante la sociedad y ante su propia militancia por las cochinas estrategias que ejecutaron el dirigente local y sus allegados.

El tradicional acarreo de militantes en las urnas no fue nada comparado con la compra de conciencias, las presiones y hasta amenazas para que los panistas quintanarroenses votaran a favor de Ricardo Anaya, abriendo al mismo tiempo la puerta para la reelección de Eduardo Martínez.

Por si fuera poco, en las redes sociales circuló un video que demuestra la grosera forma en que los escrutadores desecharon decenas de votos a favor del retador, el senador Javier Corral, catalogándolos como nulos a pesar de que eran completamente válidos.

Inconformes con los resultados ya que los dados estaban cargados desde el inicio, destacados panistas que no pertenecen al grupo del líder local señalaron que no se quedarán con los brazos cruzados ante las arbitrariedades cometidas, por lo que anticiparon que impugnarán el proceso, lo que todavía está por verse.

El daño ya está hecho. Ricardo Anaya salió triunfador con un aplastante porcentaje en las urnas, pero el partido blanquiazul en el estado recibió una nueva y profunda herida que amenaza con fracturar aún más el golpeado partido.

La permanencia de Eduardo Martínez Arcila en la dirigencia estatal todavía está en veremos, porque a pesar de que su candidato ganó la contienda y su operación política dio resultados, su estadía como capitán pone en riesgo la armonía interna e inclusa la supervivencia misma del PAN en Quintana Roo.

Si el pago de facturas políticas pesa más que el sentido común, Martínez Arcila permanecerá al frente de un blanquiazul en calidad de bulto para el 2016.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba