Chetumal, 24 de octubre
Un agente del Ministerio Público logró recuperar cerca de 263 mil pesos en un sobre de color manila que quedó debajo del cadáver del occiso y un portafolio que recuperó un empleado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), quien posteriormente siguió su camino hacia Cancún, pero dejó dicho objeto con 107 mil pesos y documentos a una mujer de quien no se revela el nombre para no entorpecer las pesquisas, pues ya fue entregado al representante social. Empleados de la dependencia están bajo investigación, pues se presume que uno o más estén involucrados en este atraco que se les salió de las manos, pues es evidente que no pretendían matar al pagador.
Investigaciones de Por Esto! Quintana Roo permitieron establecer que, cuando los peritos en criminalística llevaron a cabo el levantamiento del cadáver de Filiberto Caamal May, de 45 años, localizaron en su asiento un sobre de color manila que contenía dinero por la cantidad de 263 mil pesos.
Dicho sobre no fue visible para los delincuentes debido a que el occiso estaba sentado encima de él, como una de las estrategias que usaban cuando hacían este tipo de diligencias, pues siempre manejaban grandes sumas de dinero.
Momentos después, policías ministeriales lograron establecer que un empleado de la SCT, que viajaba a la ciudad de Cancún y que minutos posteriores al sangriento atraco llegó al sitio, resguardó un maletín que le entregó su compañero lesionado Artemio Poot Vázquez, de 52 años.
Este portafolio fue entregado a una mujer, que para no entorpecer las pesquisas, no se menciona su nombre, quien al principio cuando fue interrogada negó tener en su poder dicho maletín, pero más tarde aceptó tenerlo, y con la asistencia de personal jurídico de la SCT acudieron ante el representante social.
Ahí se entregó el maletín y se contabilizó el dinero, que en total sumó 107 mil pesos, además de contener la lista de las personas a las que se les pagaría dentro del programa de Empleo Temporal, por lo que fue integrado al expediente que se inició por el delito de homicidio y robo calificado.
Sobre los hechos, se presume que personal de la dependencia federal se encuentra inmiscuido, pues conocían los movimientos, la hora de salida, ruta y destino que seguiría el ahora occiso y su compañero lesionado, por lo que se realiza una minuciosa investigación.
Al parecer los delincuentes no tenían la intención de asesinar a Filiberto Caamal May ni a su compañero Artemio Poot Vázquez, pero por la velocidad a la que era conducido el vehículo en el que viajaban, provocó que los disparos se distribuyeran hacia distintas direcciones y un proyectil se alojó en la cabeza del conductor.
Por ello, perdió el control del volante y la camioneta Chevrolet Silverado, propiedad de la SCT, terminó por estrellarse contra el poste de un anuncio espectacular, y por la velocidad a la que se dio la colisión el vehículo dio un giro de 180 grados hasta quedar en posición contraria a la que circulaba.
Los delincuentes, al ver que Artemio Poot Vázquez, quedó tendido en la cinta asfáltica y que el conductor no presentaba signos de vida, se fueron directamente a donde estaba una caja de zapatos, detrás del respaldo del asiento y se apoderaron de los sobres que había ahí con más de medio millón de pesos, sin llevarse el empaque para calzado.
Esto hace suponer a las autoridades que los delincuentes conocían a la perfección el lugar donde guardaban el dinero, porque según testigos presenciales, el actuar de los delincuentes, desde los disparos hasta que se apoderaron del dinero, fue de aproximadamente un minuto, para posteriormente darse a la fuga.
Es por ello que las autoridades ministeriales presumen que personal activo de la SCT y que conocía a la perfección al occiso y a su acompañante, se encuentran relacionados con este atraco, por lo que abundan en las indagatorias para dar con el paradero de los autores intelectuales y materiales de este hecho violento registrado la mañana del miércoles 22 de octubre.
Fuente: Por Esto
