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Torpezas de “Chepe” Contreras golpean a Bacalar

CHETUMAL, 20 de agosto
Puntual Regional
Anwar Moguel

Con una administración controlada por funcionarios chetumaleños incrustados en áreas vitales del Ayuntamiento, al alcalde de Bacalar, José Alfredo “Chepe” Contreras Méndez, le bastaron diez meses como presidente municipal para demostrar que los pronósticos negativos de sus críticos y detractores eran más que justificados, ya que en ese corto periodo su autoritarismo y falta de tablas políticas lo han hecho caer en ilegalidades que lo tienen al borde del abismo.

Taquero de oficio, experto en cochinita pibil, “Chepe” Contreras saltó a la política y logró convertirse, en poco tiempo, en el primer alcalde electo del décimo municipio. Sin embargo, desde su arribo al poder está en el ojo del huracán por serias irregularidades que su gobierno ha cometido y que por más que intenta mantener la basura debajo de la alfombra, la cloaca ya se destapó.

A un par de meses de cumplir su primer año de mandato la imagen del alcalde bacalarense ya ha sufrido un serio desgaste debido a su falta de liderazgo y su mala administración, que ha provocado que gran parte de los ciudadanos de Bacalar reprueben su mandato de forma prematura.

Y es que “Chepe” se ha ensoberbecido y pretende vivir como un sultán árabe en el pueblo mágico de Bacalar, donde no acepta críticas y se maneja en forma despótica y autoritaria. A quienes se atreven a cuestionarlo los pone de inmediato en la lista negra de sus enemigos políticos: estás con él, o estás contra él, sin un punto intermedio.

Consciente de sus yerros de político novato, el alcalde hace hasta lo imposible por proteger su imagen pública, pero en Bacalar se aplica a la perfección ese refrán que reza “pueblo chico, infierno grande”, y sus ínfulas de grandeza, de miembro de la alta sociedad, están empezando a cobrarle una muy cara factura, ya que los excesos del alcalde se rumoran en los pasillos del Ayuntamiento y en las calles del Pueblo Mágico.

Lo más grave son las acciones ilícitas en las que ha incurrido el alcalde violentando flagrantemente la ley, sin que nadie se ocupe de ponerle un hasta aquí.

Las ilegalidades de Chepe

Una y otra vez, el “sultán” de Bacalar ha pisoteado las leyes que rigen a los municipios del estado, leyes que se supone es el encargado de vigilar que se cumplan.

En el mismo momento de su nombramiento, el último día de septiembre de 2013, Contreras Méndez cometió su primera falta al nombrar como secretario general del Ayuntamiento a Normando Medina Castro y como tesorero a Omar Escalante Muza, ambos funcionarios habitantes de Chetumal.

A “Chepe” no le importó que los artículos 119 y 123 de la Ley de los Municipios del Estado de Quintana Roo señalaran con toda claridad que tanto el secretario general como el tesorero deben tener una residencia mínima de cinco años en el municipio.

Concretó la imposición de tales chetumaleños de manera ilegal, y en el proceso ofendió a las fuerzas políticas que tanto lucharon para convertir a Bacalar en el décimo municipio, y que fueron desplazadas de posiciones claves en el Ayuntamiento por mano y obra del nuevo alcalde.

normando medina castro 2Para colmo, en el Ayuntamiento bacalarense es un secreto a voces que el que lleva la batuta en las decisiones de gran calado es justamente Normando Medina Castro, que se ha convertido en el poder detrás del trono en Bacalar.

En los pasillos, en voz baja se crítica el hecho de que sea Medina Castro el que gobierna el municipio, el que le habla al oído al alcalde y el que decide en que se va a invertir el presupuesto público y en que no.

Por su parte, custodiando los dineros municipales está el chetumaleño Omar Escalante Muza, del que todo mundo conoce sus antecedentes fraudulentos como funcionario del municipio capitalino, donde fue acusado de fraude por atletas premiados a los que entregó medallas de latón como si fueran de oro. Salió impune de su transa y Chepe lo premió colocándolo en una delicada posición de su administración.

El pasado mes de mayo otra bomba estalló en el Ayuntamiento cuando José Alfredo Contreras Méndez dio a conocer una deuda de 8 millones 600 mil pesos que dejó la anterior administración de Francisco Flota Medrano, la cual mantuvo oculta por más de seis meses por motivos desconocidos.

La millonaria deuda se debió a la falta de pagos a la CFE por el servicio eléctrico a las oficinas municipales y el alumbrado público, monto que se acumuló por todo el tiempo que duró el Concejo ciudadano.

Para poder pagar la millonaria deuda, Contreras Méndez tuvo que modificar la Ley de Egresos del Municipio y trasquilar recursos destinados para obras públicas y del fortalecimiento a la seguridad pública, una de las áreas cojas del Ayuntamiento.

Al destapar el tema en el Cabildo la deuda oculta causó indignación en los regidores, pero sin otra posibilidad más la de que afrontar el adeudo aprobaron destinar 261 mil pesos mensuales como pagos parciales a la CFE, recursos que saldrán en gran parte del Fortamun a pesar de que es dinero etiquetado con un propósito.

Sin embargo, a pesar de ese esfuerzo en los meses que le quedan a “Chepe” como Presidente Municipal pagarán a duras penas dos terceras partes del total, por lo que invariablemente pasará a la historia como el primer alcalde de Bacalar que dejará deuda formal en el municipio.

De inmediato los efectos negativos de esta decisión del alcalde se hicieron sentir en el Ayuntamiento, ya que en campaña“Chepe” prometió la contratación de 50 policías para mejorar la endeble seguridad pública en Bacalar y su zona rural, pero tras largos nueve meses de espera apenas a principios de junio contrataron a 15 policías, nada más.

Pero fuentes internas del Ayuntamiento de Bacalar aseguraron que esos 15 policías llevan todo junio y julio calentando las bancas de la comandancia, sin ejercer su labor preventiva, ya que no cuentan con equipamiento, armas y ni siquiera uniformes. El alcalde ordenó la contratación sin siquiera tener lo mínimo necesario para ponerlos a trabajar.

Lío laboral

En recientes semanas, se destapó una seria irregularidad que estaría cometiendo el Ayuntamiento que dirige José Alfredo Contreras Méndez, ya que de manera anónima empleados municipales denunciaron que no cuentan con ningún tipo de seguro médico, prestación obligatoria según la ley del trabajo vigente.

El asunto es un petardo que le puede estallar en las manos al alcalde en cualquier momento, ya que ni un solo trabajador tiene esta prerrogativa, por lo que el municipio está pisoteando la ley laboral con cinismo, con tal de ahorrarse unos pesos.

Según los empleados, algunos trabajadores municipales que formaron parte en su momento del ayuntamiento de Othón P. Blanco antes de la formación del décimo municipio, y que están sindicalizados, llegaron a un acuerdo con el municipio capitalino para que se siguieran pagando sus cuotas y así conservaran su servicio médico en el ISSSTE.

Sin embargo desde hace tres meses este pacto se rompió y los trabajadores ya no cuentan con seguro social, quedando en la indefensión en caso de cualquier accidente de trabajo y, peor aún, sin ningún tipo de prestación a futuro.

Y aunque esto lo sabe muy bien José Alfredo Contreras Méndez ha minimizado el asunto y parece no tener la intención deotorgar este beneficio a sus empleados, por lo que desde dentro ya empiezan a organizarse para realizar una denuncia ante las autoridades del Trabajo si “Chepe” sigue tratándolos como jornaleros de segunda.

La última de las acciones ilegales del experto en cochinita fue filtrada en las redes sociales, donde se dio a conocer un artero ataque contra la libertad de expresión contra la privacidad de sus propios empleados.

Su secretario particular, Eduardo Anguiano, dirigió un oficio a todo el personal y a los directores donde de manera tajante se prohíbe a los empleados tomar fotografías de los eventos institucionales y subirlas a las redes sociales, específicamente Facebook, Twitter, e Instagram.

Por capricho del alcalde “Chepe”, que no quiere que sus constantes yerros salgan a la luz pública,el documento exige al personal que si quieren publicar fotografías de eventos del municipio, primero tendrán que enviar el material a la coordinación de Comunicación Social para que sean “autorizadas”. El pretexto es “cuidar la imagen institucional”, pero el fondo es una censura digna de la época de Stalin.

El “sultán” de Bacalar

Este intento de censura no es más que una estrategia para evitar que los excesos e ilegalidades de “Chepe” se mantengan en lo oscurito, pero ha sido un esfuerzo estéril porque cada día salen más y más trapos sucios al sol.

No son pocos los bacalarenses que critican abiertamente al alcalde, sobre todo porque aseguran que se ha olvidado de sus humildes orígenes y ahora vive con los lujos de un “sultán” en un municipio pobre como Bacalar.

En su afán de pertenecer a la socialité del sur del estado, hace un par de meses utilizó como pretexto el Desayuno del Terno en Bacalar para traer como animador al conductor de Telehit de origen ruso, Kristof.

La información de la cantidad invertida en traer al conductor de televisión nacional a un evento tan pequeño en el municipio se guarda como secreto de estado, pero los bacalarenses vieron con muy malos ojos no sólo el derroche de dinero, sino el hecho de que el presidente municipal siga los pasos de otros políticos que pretenden codearse con figuras del espectáculo.

chepe y  KristoffLa lluvia de críticas tomó fuerza luego de que se subieran a las redes fotografías del alcalde con Kristoff y otros cantantes chetumaleños en una noche de fiesta en un antro de la capital.

También corren con fuerza las versiones de que el alcalde está construyendo una mansión con recursos públicos y utilizando como mano de obra a trabajadores municipales. De hecho, la propiedad en construcción no está a nombre de José Alfredo Contreras Méndez, pero sus paisanos aseguran que el dueño no es más que un prestanombre, y que en poco tiempo se sabrá la verdad.

Y mientras tanto, el municipio de Bacalar sigue padeciendo de pobreza, de una alta marginación en sus zonas rurales, carece de servicios públicos vitales para la población, las calles de la cabecera y de la bella costera de Bacalar están hechas un desastre y la delincuencia sigue creciendo día con día.

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