Chetumal, 26 de octubre
Juan Juárez Mauss
El agua que consumen los quintanarroenses se encuentra contaminada con salmonelosis y otras bacterias, por lo que se deben de revisar las normativas de las instancias de su manejo por la Comisión Nacional del Agua y la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado, aseguró Eduardo Sánchez Anaya, presidente del Comité Organizador del 12° Foro Internacional Desarrollo Sustentable y Cambio Climático.
“Se debe de tener una agua potable de calidad y el agua potable que hay en Quintana Roo no es de calidad, tiene problemas, en un estudio que hicimos en el norte del estado encontramos salmonelosis en el agua, que quiere decir que existen desechos fecales”, manifestó.
Detalló que a esta conclusión llegaron los expertos de varias partes de México y el mundo que participaron en este foro la semana pasada en la ciudad de Cancún.
Señaló como uno de los puntos contaminantes del agua que hay en el subsuelo los rellenos sanitarios que han sido y siguen instalándose cerca de la mancha urbana; casas con fosas sépticas, además de la gran cantidad de productos hechos de polietilen tereftalato (pet), que también es fuente de esta contaminación a los mantos acuíferos y hasta ahora ninguna autoridad ha hecho algo para tener un programa de su manejo.
Dijo que es necesario hacer un estudio integral para analizar el tema del agua, en donde también se involucre a la Comisión Nacional del Agua porque esa instancia de gobierno se ha vuelto cómplice de la mala calidad del agua en Quintana Roo. “Debe de intervenir, debe de dar recursos económicos para estudios y planes de manejo”, sentenció.
Compartió el caso de Chetumal, en donde la calidad de agua supuestamente potable tiene una gran cantidad de sarro que incluso ha obstruido los conductos de las propiedades de sus usuarios. “No es posible que dejemos que las sales lleguen a las tuberías, siempre las van a tapar”, dijo.
Externó que Quintana Roo se ha caracterizado a nivel nacional en el desorden de inversiones ya que se utilizan para todo, menos para obras hidráulicas que ayuden a mejorar la calidad del agua que consumen las personas, tal es el caso de un edificio inconcluso en la avenida Insurgentes y la planta purificadora del kilómetro 19.
Insistió que es necesario que las instancias de gobierno cumplan con las funciones para la cuales fueron creadas y no solo en foros reconozcan el problema y no hagan absolutamente nada, pues se sigue poniendo en riesgo la vida de las personas a través de enfermedades por consumir esta agua contaminada.